El pasado sábado 25 de abril fue un día especial para la comunidad relacionada con Itaka-Escolapios en Pamplona-Iruña y Tafalla. El colegio Calasanz Escolapios sito en la calle Olite de la capital navarra, acogió a más de de 200 personas (voluntariado, socios, colaboradores, familias y profesorado de los tres colegios escolapios de Navarra) para celebrar los diez años de la Fundación creada e impulsada por la orden religiosa apostando por la educación de las personas más desfavorecidas “como la mejor manera de transformar el mundo y preparar un mañana mejor”.
Bajo el lema “Ven y verás/Zatoz ikustera”, la jornada fue aprovechada para hacer balance de lo realizado durante esta década, dar un repaso a la realidad actual y plasmar los restos de futuro en los diferentes proyectos y actividades.
Tras la charla “Una mirada a diez años de Itaka-Escolapios en Navarra”, el público adulto recorrió la exposición dividida en tres partes : “Una mirada al Sur”, “Transformar nuestra mirada – Mirar para transformar la realidad” y un “museo”, en el que mediante 10 paneles se resumía la realidad de los proyectos actuales de Itaka-Escolapios en Pamplona-Iruña y Tafalla: Movimiento Calasanz– Calasanz Kideak (grupos de educación en el tiempo libre de niños/as, adolescentes y jóvenes), centro socioeducativo ikaskide, en el casco viejo de Pamplona (apoyo escolar Primaria, ESO y bachillerato, alfabetización de inmigrantes adultos, integración socio laboral, asesoría jurídica, formación de adultos, acompañamiento a familias…), apoyo escolar Trastevere, en Tafalla, campañas de sensibilización (Semana de la Paz, Caminhada, Marcha Solidaria…), albergue Txamantxoia (en Belagua, para encuentros, cursos, campamentos…), captación de recursos (subvenciones públicas, financiación a través de entidades privadas, socios/as, donativos…) y Escuela de Educación en el Tiempo Libre Lurberri (titulaciones oficiales reconocidas por el Instituto Navarro de Juventud, Certificaciones profesionales reconocidas por el Servicio Navarro de Empleo, monográficos…).
La chavaleria disfrutó de actividades durante toda la mañana y se puso fin a la jornada tras un aperitivo y la foto de familia.
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