Ayer fue un día de celebración para el mundo de la danza popular en Tafalla; un encuentro entre varias generaciones con una afición común, dispuestas a disfrutar y a conmemorar el 50 aniversario de la formación del Grupo de Danzas de Tafalla / Tafallako Dantza Taldea.
A las 10:00h., en el almuerzo previsto en la ciudad deportiva, se fueron sucediendo los saludos, abrazos y vivencias de unos y otros, algunos rondando los 70 años, recordando con cierta nostalgia aquellos primeros inicios que ha dado paso al grupo dinámico de hoy.
Seguidamente se formó una vistosa comitiva con las banderas del grupo, Navarra e Ikurriña al frente, en la que formaron parte más de 180 personas entre dantzaris y músicos para dar una vuelta por la ciudad de Norte a Sur, previas paradas en las escaleras del Rincón de Mencos y en el atrio de Santa María y plasmar en una fotografía testimonial este redondo aniversario.
Al llegar a la Plaza de Navarra, hacia las 13:00h, dantzaris de ayer y hoy exhibieron una muestra de sus bailes: alavesas, polkas, Scottish, Bralea, mazurcas, mascarada souletina, entre otros, muy aplaudidos por el público que se refugiaba del sol bajo los plataneros.
Los bajos de la plaza del Mercado acogieron a unas 200 personas en la comida y, ya en la sobremesa, en medio de mucho jolgorio, Mari Jose Elizalde, de la asociación de dantzaris y músicos Martin Galdiano, en un acto protocolario e informal, hizo una breve semblanza de la trayectoria de todo el grupo y se procedió a la entrega de pañuelos a los y las dantzaris de 1966 y de quienes les ayudaron (Oberena de Pamplona). El joven Aimar Alcuaz, de los gaiteros Aldamar, recibió otro por el futuro que representa y lo mismo Elvira Elizalde, dantzari en tiempos de la República, cuyas manos han elaborado trajes de todos los modelos y épocas. Elvira, en compañía de buena parte de su familia,recibió emocionada su pañuelo. Edurne Marco, en nombre del grupo de dantzaris actual recogió también su obsequio.
Berta Arzoz,monitora del grupo de dantza de Chiquilandia, no quiso perder la ocasión para escribir unas letras de felicitación a todo el grupo leídas por Ana Lacasa, integrante de aquella hornada.
Finalmente, Mari Jose Elizalde, Mari Jose Ibáñez y José Luis Echecón, fueron sorprendidos con un detalle de la Asociación Martín Galdiano por su entrega y labor de monitores a la hora de ensayar nuevas piezas de baile.
Y después la música y las danzas volvieron a la calle para alegría de protagonistas y paseantes. A las 20:00h la jota de La Pilindros en la Plaza de Navarra cerró los actos oficiales si bien, hasta muy avanzada la noche, todavía se oían las notas de la fanfarre acompañando los pasos de quienes se resistían a terminar tan memorable jornada.