[:es]Mari Jose Ruiz, entrevista publicada en la revista de La Voz de la Merindad del 15 de abril

La pandemia no ha modificado la asistencia sanitaria pública en el Centro de Salud de Tafalla. Sí el modo de trabajar y las agendas previstas

La Zona Básica de Tafalla y Artajona, han sido protagonistas involuntarias en esta pandemia con datos punteros muy por encima de otras zonas de Navarra. Pili Arbona Jiménez, jefa de Unidad de Enfermería del EAP de Tafalla (equipo de atención primaria) en el Centro de Salud de Tafalla, pese al intenso trabajo de atención y coordinación previo, durante y lo que está por venir, ha contestado rápida y amablemente este cuestionario -por razones obvias- vía correo electrónico.

Comisión de Salud Comunitaria: Pili Arbona, la tercera po la izquierda. Foto de archivo

 

¿Cuándo os disteis cuenta de que «esto» iba en serio? o lo supisteis desde el principio pese a que nadie se imaginaba la gravedad?

Yo creo que por mucho que íbamos oyendo en las noticias lo que ocurría en otros países, ninguno estábamos preparado realmente para lo que es una pandemia a nivel mundial.

¿Qué protocolos de actuación se han seguido?

Desde la dirección del SNS comenzaron a elaborar protocolos y a realizar reuniones y sesiones formativas para explicarnos qué era el virus COVID-19 y el procedimiento de actuación que debíamos seguir ante posibles casos sospechosos.

Este protocolo ha ido cambiando adaptándose a la situación. Los primeros días solo se consideraba posible caso a toda persona con síntomas respiratorios determinados: tos, fiebre y/o disnea de aparición brusca y que hubiera viajado recientemente a una zona de riesgo. Conforme fueron pasando los días se vio que se iba extendiendo rápidamente y pasó a considerarse una enfermedad de transmisión comunitaria, por lo que, ante la imposibilidad de realizar la pruebas de detección (PCR), se considera como posibles positivos prácticamente a todas las personas con síntomas respiratorios.

Las informaciones afirman que Artajona y la zona básica de Tafalla, son casi punteras en número de personas afectadas. ¿A qué  crees que se debe?

Los datos se refieren a pruebas realizadas que han dado positivo. Hasta ahora dichas pruebas se han realizado a enfermos que son derivados a urgencias para posible ingreso, trabajadores (con síntomas) considerados esenciales, es decir, sanitarios y personal que trabaja en centros relacionados con salud, trabajadores de residencias, bomberos, policías…

Tanto en la ZBS de Artajona como en la de Tafalla ha habido 2 focos principales de contagio que han sido los desencadenantes de este aumento en el nº de casos. En la ZBS de Tafalla (incluye también muchos pueblos de la Valdorba) existe también el condicionante de haber 4 residencias de personas mayores (3 de ellas con un nº elevado de residentes) con su respectivo personal, y los servicios esenciales citados anteriormente, por lo que es posible que se hayan podido realizar más PCR.

 

¿Habéis modificado horarios, consultas? 

Sí, claro. Hemos tenido que modificar casi en su totalidad nuestra forma de trabajo. En estos momentos se da prioridad a las personas con síntomas respiratorios para intentar realizar una vigilancia y atención correcta. Por ello se han anulado todas las consultas para procedimientos no urgentes, como por ejemplo analíticas y pruebas diagnósticas de control anual. Estamos intentando resolver el máximo posible de procesos por vía telefónica para que la gente no tenga que acudir al centro y por parte de enfermería se está acudiendo más a domicilios de personas mayores y evitar así que salgan de casa.

Hemos cambiado las agendas y la organización del equipo para tener claramente diferenciados el circuito de respiratorio del resto de las consultas, de tal forma que cada profesional sabe qué va a tener que atender cada día y no haya tanta posibilidad de contagios fortuitos.

En cuanto a afectados por el COVID, tras explicarles las medidas de aislamiento, se realiza seguimiento telefónico para vigilar la evolución y decidir posibles actuaciones que pudieran necesitar.

¿Ha habido personal de refuerzo? ¿Y bajas sanitarias a causa de estrés, enfermedad, contagio…? 

Por parte de la dirección del SNS, dentro de las posibilidades, se están poniendo todo tipo de facilidades en cuanto a aumento de personal y aunque, por ejemplo, no hay médicos disponibles para contratar, en otros estamentos no ha habido de momento problema para aumentar jornadas reducidas o contratar refuerzos. En cuanto a bajas en el equipo por contagios, claro que hemos tenido, tanto en personal nuestro como de las residencias, lo cual dificulta todavía más el trabajo en todos los niveles.

Desde la Dirección del centro vamos reevaluando semanalmente esta organización interna y la modificamos según las necesidades que van surgiendo al variar la situación en cada una de las residencias, en la atención al resto de la población y entre los profesionales del EAP.

 

¿A qué se le ha dado prioridad? ¿Cómo se ha atendido a las personas que llaman o acuden con síntomas o creen que los tienen? 

Se ha habilitado una agenda atendida por una enfermera para todas las primeras llamadas relacionadas con este tema que de forma telefónica resuelve dudas, da indicaciones y gestiona la atención que tiene que realizarse con cada usuario, es decir, según la necesidad (tramitación de bajas, seguimientos telefónicos o atención presencial…) cita en la agenda correspondiente para que el resto del equipo lo vayamos realizando.

¿Ha habido complicidad, implicación, por parte de la población con vosotros? 

Totalmente. La población ha entendido perfectamente la situación en la que nos encontramos y en ese aspecto no estamos teniendo ningún problema.

¿La respuesta de la administración o instituciones en cuanto a demanda de material básico de prevención  (mascarillas, guantes, batas…) ha sido el correcto? 

Como en el resto del país, este tema es el que peor se ha podido gestionar por falta de material. Del pedido que hacemos para nosotros y para distribuir entre las residencias y consultorios, no llega el material suficiente, sobre todo de mascarillas FPP2 (necesarias para atención directa y cercana con pacientes COVID + ) y de batas de protección.

Cuando esta situación termine será importante valorar la importancia de tener y producir el material necesario para que no vuelva a suceder este desabastecimiento.

En este punto sí quiero lanzar un AGRADECIMIENTO en mayúsculas a todas las empresas y particulares de la zona que nos han donado su material, mascarillas, guantes, buzos, gafas… También hay gente elaborando batas de plástico para proteger por encima de la ropa, pantallas de protección facial, incluso las mascarillas confeccionadas de tela. Toda colaboración es importante y necesaria y nos ha ayudado mucho para solventar este problema de falta de material. Muchas gracias en nombre de todo el equipo.

¿Vuestro trabajo se está valorando socialmente más que antes? 

Creo que la mayoría de la población se está dando cuenta de la situación que nos ha tocado vivir y agradecen la dedicación y el trabajo que realizamos.

En general, quienes se encuentran en su domicilio en aislamiento tienen dudas, miedos, inseguridad y agradecen el seguimiento telefónico que les prestamos y el acompañamiento, aunque sea a distancia.

En unas circunstancias tan especiales ¿es posible olvidarse del trabajo al llegar a casa?

¿Sinceramente? No. Piensas en cómo evolucionarán los que has llamado a casa, los que sabes que están ingresados, incluso en UCI… Le das vueltas también a qué tendremos que cambiar la próxima semana, y la siguiente y la siguiente…

¿Os parece que se está dando demasiada información?

Para que entendamos la situación, toda información es importante. Pero en otros aspectos sí que puede ser demasiada. De hecho, hay veces que adelantan datos o circunstancias que todavía no se están llevando a cabo a día de hoy (por ejemplo la realización de test rápidos…) y generan confusión, alarmas, llamadas anticipadas…

¿Cuál ha sido hasta la fecha el peor momento que habéis vivido? ¿y el mejor? 

Momentos malos ha habido bastantes, y cada trabajador tendremos los nuestros en particular. Lo que veo diferente entre un centro de atención primaria y el hospital es la cercanía previa con los pacientes, sobre todo aquí, que prácticamente nos conocemos todos. Es muy duro cuando vas viendo día a día que la evolución no es buena e incluso en algunos casos llegan a fallecer. No son cifras como las de la televisión. Son personas conocidas con nombre y apellidos, con familiares que no han podido despedirse de ellos como es debido y que necesitan un apoyo y un abrazo del resto de su familia y amigos que no pueden dar por el aislamiento

Los mejores momentos son los casos que se van resolviendo (la mayoría ) y con el trabajo que realizamos en el equipo, todos a una, ayudándonos, sin importarnos las horas de más.

Residencias de Tafalla y Barasoain

 

¿Os toca ir a alguna residencia de ancianos? 

Los centros sociosanitarios son especialmente sensibles por la vulnerabilidad en la que se encuentran un alto porcentaje de sus residentes. En nuestra Zona Básica de Salud, como he señalado, tenemos 4 residencias (1 en Barasoain y 3 en Tafalla?. Cada una de ellas está en una situación y momento diferente, ya que no todas han comenzado con los contagios a la vez y no todas ellas tienen idéntica organización interna. El problema general en que se encuentran casi todas es la falta de personal debido a bajas en sus trabajadores. En algunas de ellas falta personal de enfermería por lo que desde el SNS y bienestar social se han contratado enfermeras para realizar esa asistencia. Hemos asignado una enfermera y un médico del equipo responsables de cada residencia para ir gestionando las demandas y necesidades diarias. Desde el Centro, hemos organizado la atención necesaria y el apoyo a quien lo ha necesitado en organización de zonas de aislamiento y manejo de la atención. Diariamente, un médico del Equipo de Atención Primaria está acudiendo por las mañanas para atender a las personas residentes, previamente valoradas por el personal de enfermería de la residencia.

¿Consideras que va para largo?

Es difícil saber qué va a pasar más adelante. Notamos que va disminuyendo el número de nuevos casos, pero veremos qué ocurre a partir de que termine el estado de alarma y podamos poco a poco hacer una vida normal.

¿Cuántas consultas estimas que se han atendido desde la centralita de Tafalla? ¿Y el porcentaje que habéis derivado a Pamplona?

Podría repasar las agendas y deciros la cifra exacta, pero te lo digo sin mirar: llamadas telefónicas muchísimas, sobre todo la primera semana. De la cantidad de llamadas entrantes y salientes que realizábamos en todos los Centros de salud, hospitales, residencias… se colapsaron los teléfonos del Gobierno de Navarra y no era posible contactar con los pacientes. Tuvimos que utilizar nuestros móviles particulares durante toda la semana.

Vista la dimensión que ha adquirido la pandemia, y a toro pasado, ¿podían haberse mejorado algunas pautas?

Por supuesto que sí, y me imagino y espero que después de esto muchas cosas se plantearán de otro modo, pero hay que decir que a toro pasado es muy fácil decir cómo se podían haber hecho las cosas y qué podíamos haber mejorado. La realidad es que no es posible volver al pasado y que ojalá está situación no vuelva a repetirse nunca. Ahora nos toca seguir trabajando juntos, colaborar entre todos y seguir las indicaciones y medidas de protección aconsejadas: “distancia social, lavado de manos, precaución y quedarnos en casa”.[:]