La fundación Itaka Escolapios, creada e impulsada por las Escuelas Pías y las Fraternidades Escolapias lleva activa en Tafalla desde el año 2006. Su trabajo consiste en dotar de herramientas de educación a las personas más desfavorecidas, creando compromiso entre las nuevas generaciones mediante diversos proyectos.

Una de sus labores mas relevantes es el proyecto “Ójala”, donde, con la colaboración del Ayuntamiento, se imparten clases de castellano a personas emigrantes.

Itaka también se encarga de organizar la anual marcha solidaria, cuya última edición se celebró el pasado 20 de mayo con gran éxito. Hemos charlado con Esther Gil, quien nos ha explicado cómo trabaja la fundación y qué proyectos lleva a cabo.

¿Qué actividades realiza la fundación en Tafalla?

La Fundación tiene diferentes proyectos:

“Trastévere”

Es un apoyo escolar para niños y niñas de cualquier centro educativo tafalles de 6 a 16 años. Se realiza de lunes a jueves de 16h a 17:30h y se ayuda con las tareas y competencias que necesita cada persona, fomentando la lectura y ofreciendo a su vez un rato lúdico de juegos y actividades en grupo. Entre las personas voluntarias se encuentran chavalas y chavales de 4º ESO del cole de Escolapios y algunos exalumnos.

EL programa “Acompaña”

Consiste en ayudar a las familias y alumnado de Escolapios para crear condiciones óptimas de educabilidad, reforzando las habilidades sociales y emocionales para garantizar, además de un buen clima inclusivo y de seguridad, la igualdad de oportunidades de acceso al proceso de enseñanza-aprendizaje.

“Ojalá”

Es un proyecto conjuntamente elaborado con el Ayuntamiento de Tafalla que se realiza desde hace 5 años. Las participantes son personas adultas migrantes en procesos de inserción laboral, con dificultades socioeconómicas, que no se encuentran dentro del sistema educativo formal y que demuestran interés en realizar un proceso de alfabetización. Las mujeres tienen prioridad de atención en el programa.

El Ayuntamiento subvenciona las clases de castellano, a lo que desde la fundación sumamos talleres de costura, cocina y “quedadas”, para promocionar también intereses que tienen las participantes, fomentar el habla en castellano para que la vida cotidiana y diaria en Tafalla se les haga más fácil y fluida. Actualmente entre 40-50 personas, en su mayoría mujeres, reciben las clases de alfabetización. El objetivo principal es favorecer la integración de la población migrante de Tafalla y ayudar a las personas participantes a crecer en autonomía.

Sensibilización

También realizamos diferentes campañas de sensibilización durante el curso escolar, para incentivar valores como la gratuidad, empatía, creatividad, trabajo en equipo… También se realizan campañas solidarias ante diferentes injusticias. El colofón del “Mes de sensibilización”, que es la campaña principal, es la Marcha Solidaria.

¿Quién forma la fundación?

Está formada por un equipo de sede de 6 personas, 2 personas liberadas que coordinan los proyectos de “Trastévere” y “Ojalá” y unas 28 personas voluntarias (desde chavales de 16 años hasta personas de más de 70) que dedican su tiempo, energías y capacidades para transformar el mundo aportando su granito de arena.

¿En qué consiste exactamente la Marcha Solidaria?

Es una campaña para ayudar a sostener, educativa, pastoral y económicamente, veintinueve centros educativos Escolapios situados en Bolivia, Camerún, Gabón, India, Mozambique, República Democrática del Congo, Senegal y Venezuela.

Como colofón se realiza una jornada festiva en la plaza donde cada persona realiza su aportación. Se compran dorsales solidarios, se realiza un mercadillo con juguetes, pequeños obsequios, alimentos elaborados artesanalmente etc. También se coloca una barra y se disfruta de espectáculos de música y danza o pintacaras.

¿Cuál ha sido el balance de este año?

EL balance ha sido muy positivo. En el colegio se ha realizado una campaña donde el alumnado tenía que buscar información de los proyectos y países a los que van destinados los fondos recaudados, en forma de sensibilización. En la cuestión económica, todavía nos falta revisar algún donativo y estimar lo recaudado, pero creemos que serán en torno a unos 5000€, gracias a la generosidad de muchas personas.

En cuanto al proyecto “Ójala”, ¿cuánta gente trabaja actualmente de forma voluntaria?

Hay 6 personas voluntarias en las clases de alfabetización y castellano, y 4 voluntarias que gestionan los talleres de costura y cocina a las que hay que agradecer su dedicación y labor.

¿Cuál es el perfil mayoritario del alumnado?

Suelen ser mujeres magrebís, en su mayoría de edades adultas entre 35 a 55, aunque también hay jóvenes y mujeres de edad más avanzada.

¿Qué supone este tipo de actividades para las mujeres cuyas culturas dificultan la integración en la vida local?

Una “ventana con luz” para poder integrarse en la vida diaria, desde compartir en el parque las tardes con otras familias, poder ser autónomas para realizar la compra, entender las indicaciones que les da el médico o apuntarse algún taller o actividad lúdica.

¿Qué se les enseña, además del castellano?

Diría que, en muchas ocasiones a sonreír y disfrutar, de un ambiente para ellas, un rato que se pueden dedicar a sí mismas.

En lo práctico, diría que a realizar actividades que en el día a día nosotras ni nos damos cuenta de que las hacemos, porque entran dentro de nuestra rutina. Desde comprar el pan, hacer gestiones en el ayuntamiento, revisar la factura de la luz, pedir cita en el médico….

¿Qué lección aprende el profesorado del alumnado?

Algo que creo que aprendemos tanto participantes del proyecto, como voluntarias. Y es que, a pesar de nuestras diferencias, tenemos muchas cosas en común, muchos objetivos vitales muy parecidos: querer lo mejor para nuestras familias, estar en un lugar donde nos sentimos parte, incluidas, escuchadas… Que cuenten con nosotras para realizar actividades y sentirnos importantes.

Creo que este proyecto cambia día a día muchos corazones y agranda muchos ojos, que a veces los tenemos fijos en un lugar y hace que perdamos muchas perspectivas de la vida.