Charlamos con Javier Martínez “Marti” sobre los conciertos que se celebrarán durante marzo en el Kulturgune

Dícese del rock and roll que no es apto para oídos cultos, que es pasto de salvajes que no saben disfrutarlo sin una priva en la mano y no es merecedor de galanterías ni acústicas refinadas. En otras palabras, que de cultura tiene poco.

Pues bien, a pesar de que a los rockeros no nos asustan tales calumnias (sino que nos halagan), la programación cultural tafallesa de este año viene a romper mitos y barreras, queriendo sacar al rock de las tabernas, plantándolo en el escenario de la gran desconocida del Kulturgune: la Sala Negra.

Se han preparado un par de conciertos durante dos viernes de marzo a las 21:00 con una entrada de 8€. El 3 nos visitarán Flamingo Tours; una banda de r’n’r buscavidas proveniente de Catalunya, mientras que el 24 estarán sobre las tablas Etxekalte, un cuarteto de rock alternativo de Bermeo.

Quién mejor que Javier Martínez “Marti”, vocal del Consejo Sectorial de Cultura y veterano melómano amante del rock, para explicarnos la iniciativa con todo detalle.

Antes de nada, Marti, explícanos qué es eso del Consejo Sectorial de Cultura, para quien no lo sepa.

Es el grupo motor que diseña las actividades dirigidas por el Área de Cultura del Ayuntamiento de Tafalla, que viene a sustituir lo que antes era el Patronato de Cultura. Esta presidido por el concejal de Cultura y cuenta con un técnico y varios vocales, algunos concejales y otros no.

Quiero aclarar que hay otras áreas que también programan actos culturales (Festejos, Juventud, Euskera…) pero el Consejo solo diseña con las partidas presupuestarias dirigidas a Cultura.

¿Cómo surge la iniciativa de traer conciertos de rock a la Sala Negra?

Hubo un antecedente, y es que en enero de 2020 tocó aquí la banda americana Track Dogs, pero durante la pandemia se truncaron las posibilidades de hacer algo por el estilo.

cartel conciertos sala negra kulturgunea

En el Consejo vimos que programamos actividades musicales de todos los estilos: folk, clásica, corales, Escuela de Música, jotas, Tubala Brass Week… salvo la relacionada con la llamada música urbana.

Es cierto que otras áreas si lo hacen (en Juventudes o Fiestas hay conciertos de pop, rap, música electrónica, etc), pero no se desarrollan en el Kulturgune. Por ello querriamos preparar un par de conciertos para cada semestre, ya sean de pop, reggae, rock o estilos de otro tipo.

También es forma de darle un uso más continuo a la Sala Negra.

¿Qué características tiene?

Es una sala muy bien equipada, que dispone de mesa y equipo de sonido propios. Tiene capacidad de instalar el equipo de luces portátil del Kulturgune y su acústica es muy buena, además de que al ser cuadrangular no tiene puntos ciegos.

Este equipo ha estado infravalorado hasta ahora ya que solo se ha abierto para ciertas obras de teatro que no requieren escenario, sesiones de bertsolarismo, reuniones, mítines , despedidas civiles, cine-forum o como lugar de vacunación.

La pega puede ser que no es una sala apta para un ambiente de juerga, pero cada cosa a su tiempo.

¿Se tratará de algo puntual o queréis continuar con la iniciativa en futuras ocasiones?

Diría que sí. Por ahora veremos la respuesta del público, pero si no viene mucha gente no nos daremos por aludidos. Creemos que los actos culturales deben ofrecerse vengan 30 personas o 300.

Hay disciplinas que no tienen mucho seguimiento, pero desde el Área se deben seguir potenciando como enriquecedores culturales de la ciudad.

¿Qué tipo de bandas se prevé traer? ¿Se cuenta con alguna empresa de management para escoger los conciertos?

Son las propias empresas quienes contactan con el Ayuntamiento y es el Consejo quien decide qué traer. En este caso se han escogido dos bandas que representan abanicos muy diferentes.

Por un lado los Flamingo Tours, que beben del rock americano clásico y cantan en castellano y en ingles. Por otro, Etxekalte, un grupo euskaldun difícil de etiquetar inspirado en corrientes más contemporáneas.

Creo que se puede disfrutar del rock de la misma manera que cualquier otro tipo de música

En general, buscamos grupos que cualquier persona pueda disfrutar, no tanto grupos que llenen salas o que necesiten de un ambiente muy juerguista.

Entre otras ideas, más adelante nos gustaría montar algo con grupos nóveles de la comarca que quizás no han tenido oportunidad de tocar con un buen equipo.

Estamos abiertos a aportaciones populares y animamos a la ciudadanía a que contacte con la concejalía o el Consejo de Cultura.

¿Cómo veterano aficionado del rock, como ves el panorama local? ¿Crees que el público responderá bien a este tipo de conciertos?

Veo que hay mucha afición al rock como diversión, en fiestas, Semana de la Juventud etc. De hecho, al contrario que en mis tiempos, la juventud de ahora es más de conciertos que de verbenas.

Diría que hay un sector amplio de la población que le gusta el rock, pero que se reduce bastante a la hora de presentar inquietudes por descubrir nuevos grupos.

Cuando hablo de personas aficionadas quiero recalcar que no solo hablo de jóvenes, ya que los estilos no entienden de edades, al igual que a una persona joven le puede flipar Vivaldi, o yo que sé.

Por otra parte, tenemos una variedad muy interesante de grupos activos, alguno incluso con referencialidad en Euskal Herria y en el Estado.

En cuanto a conciertos, 2022 ha sido un buen año. Los han habido en bares, en la Plaza de Toros o en la Kube, a quien hay que agradecer que programe este tipo de eventos.

También los conciertos de la semana pre-fiestas nos dejaron muy buen sabor de boca, igual que los de las Txoznas, donde se vio una variedad de estilos muy interesante.

Como contrapunto, y es algo que se puede extrapolar a toda la sociedad, creo que no hay tanta cultura musical y con la inmediatez de las redes no se valoran las publicaciones o los discos como es debido.

No tenemos paciencia para escuchar siquiera canciones enteras y el mensaje del artista no se capta en su totalidad.

sala_negra kulturgune tafalla

La sala negra, preparada para el campeonato de Ajedrez que se celebró el pasado 5 de febrero

¿Cómo te gusta consumir música?

Generalmente en plataformas. Ahora compro pocos CDs o vinilos, y generalmente lo hago para apoyar la escena local. Eso sí, la escucho en un buen equipo de altavoces y dedicándole su tiempo.

Como decía Manrique, famoso periodista musical, “para valorar un disco tengo que oírlo en el ordenador, en el coche y en el equipo de casa; entonces se puede decir si un disco es bueno o no”. Otra forma de consumir música sería la radio. Yo le pego a Radio 3, básicamente.

En cuanto a corrientes musicales, vemos que para las nuevas generaciones la guitarra está saliendo del epicentro, perdiendo el dominio ante el ordenador y la música electrónica. ¿Cómo ves esa evolución?

Creo que es algo inevitable, y el debate de cierta gente sobre si es o no música de verdad, lo veo muy estéril. Los tiempos vuelan y un chaval de hoy en día puede hacer una canción con una letra y unas bases en el ordenador.

Yo soy más de rock and roll, aunque también me gustan el folk o la cumbia electrónica, por ejemplo. Tuve la suerte de pertenecer a una cuadrilla que oía todo lo que salía, desde grupos madrileños a los últimos punks de Rentería.

Creo que cada vez nos ceñimos menos a etiquetas y es normal que a una persona joven le gusten estilos variopintos.

Además, cada vez hay más subgéneros, más tendencias, y las referencias anteriores todavía siguen influyendo en nuevos grupos.

Personalmente, ¿a quién te gustaría ver sobre las tablas del Kulturgune?

Habría muchos. A bote-pronto se me ocurren los Corizonas, Dani Llamas, Liher…

Hay otros muchos grupos que me gustan pero que quizás no los veo en este formato, que es más para disfrutar de la música y no tanto de la farra y la exaltación de la amistad.