El hombre de estos campos que incendia los pinares y su despojo guarda como botín de guerra, antaño hubo roído los negros encinares, talado los robustos robledos de la sierra.
Hoy ve a sus pobres hijos huyendo de sus lares; la tempestad llevarse los limos de la tierra por los sagrados ríos hacia los anchos mares; y en páramos malditos trabaja sufre y yerra.
Antonio Machado
Estos son versos clarividentes y de total actualidad en todo el planeta. Las malas técnicas agrícolas alimentan a parte de la población a costa de esquilmar los recursos de las generaciones futuras.
El proceso ha sido siempre el mismo. Primero se tala el bosque, luego viene la ganadería, la materia orgánica decae, más tarde la agricultura con trigo y cebada, decae totalmente la materia orgánica en el suelo y, después, nada.
CONTENIDO EXCLUSIVO PARA SUSCRIPTORES
Debes acceder para ver este contenido, por favor, accede o suscribete.
¿Aún no eres miembro? Únete a nosotros
Deja tu comentario